Tengo una poderosa tendencia a la monogamia que me hace parecer una mujercita normal, aunque no sé cuáles sean los motivos normales de la monogamia. Mis razones, más que emocionales o morales, son mecánicas. Es como andar en bicicleta. A cada cambio de bicicleta se pierde ritmo, velocidad, precisión.

Intenté explicarle esto a un novio que tenía, pero él, curiosamente, lejos de interpretar que tenía mi fidelidad asegurada entendió que cualquier hombre me daba mismo. Me dijo puta y me dio una patada en el traste.

Está dicho. A la mejor bicicleta se le puede pedir ritmo, velocidad y precisión. ¿Por qué me empecino en darle conversación?

0 comentarios: